El utilizar las historia de vida como un método para la investigación social, se basa en dar argumentos de fondo que legitimen a los métodos cualitativos como estrategias importantes para el estudio de lo social.
En forma particular en el caso de las historias de vida, uno de los argumentos centrales es: que
* Que el hombre no es un dato sino un proceso que cual actúa en forma creativa en su mundo cotidiano, es decir, lo social implica una historicidad.
*Un segundo argumento es el de la necesaria vinculación entre texto y contexto, en el que este último implica reconocer su sentido re-creativo, el cual es un elemento que implica la posibilidad de la autopercepción del individuo-sujeto de la historia de vida en su vinculación experiencial con el ambiente con textual.
El obtener mayor información acerca de su formación y su meta en la vida lo convierte en un humano factible de estudiar pero difícil de separar, ya sea de percepciones o juicios, sin embargo tampoco es tomado como objeto o como cosa.
La relación entre texto y contexto la realiza el individuo como parte de su proceso vivencial en tanto que agente histórico. Las historias de vida tienen, finalmente, la capacidad de expresar y formular lo vivido cotidiano de las estructuras sociales, formales e informales, de ahí su aporte fundamental a la investigación social.
El desarrollo de las culturas y los avances -técnicos y sociales- no serían comprensibles si a lo largo de la historia no se hubiesen producido permanentes contactos entre pueblos y culturas, de esta forma y por medio de los relatos es que el ser humano va creando una identidad que entiende que la realidad es lo que debe estudiarse, el acercamiento a la objetividad ayuda a reconocer que la sociedad es un grupo d eindividuos con pensamientos propios pero cultura comunal.
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